Camino de la reserva
En la provincia de Tucumán, Argentina, en el límite Este del departamento Tafí Viejo y el Oeste del de Burruyacu, existe desde el año 1982 por Decreto
Provincial Nº 901/82, la reserva provincial Aguas Chiquitas que constaba, en ese entonces de 740 has.
Actualmente posee 3165 has. Dista, aproximadamente, a 3 kms. del dique Celestino Gelsi y a 28 kms. de la ciudad capital.
Desde la entrada al camino, se puede ver el Río Loro que viene desde el Noreste y que recibe las aguas del río Aguas chiquitas.
Desde la entrada al camino, se puede ver el Río Loro que viene desde el Noreste y que recibe las aguas del río Aguas chiquitas.
Río Loro
Entusiasmada por los relatos sobre la existencia de cascadas en el río "Aguas Chiquitas" que les da su nombre, decidí intentar llegar a ellas en dos oportunidades, las que resultaron, en ambos casos, un fracaso. Hay que, literalmente, "trepar" laderas muy empinadas que me impidieron el ascenso y el cual se tornó, en varias oportunidades, peligroso. Por otro lado, a dichos saltos se accede también por el río, llegando a la parte inferior de la primera cascada donde se forma un hermoso estanque de agua calma y algo profunda, ideal para refrescarse luego de exigido trajín pero, también, la travesía es bastante complicada.
Cartel que indica la entrada a la reserva
Lugar, a orillas del camino, desde el que se inicia el ascenso a la loma.
Aparte del enorme atractivo que significan esas recónditas caídas de agua, el camino que conduce hasta un claro en la parte superior de la loma es de una belleza exuberante por su vegetación de yungas o bosque de yungas, aunque contaminada ya con especies vegetales no nativas (y seguramente, animales, también).
Aspecto del bosque de la reserva
Abajo: vista de la vegetación de la zona, clasificada como bosque montano inferior subtropical perennifolio. Las montañas forman parte del sistema de Medina (sur del mismo) que pertenece a las Sierras Subandinas. A la izquierda y en primer plano, se observa una morera (morus alba), especie foránea, con sus hojas amarillentas, a diferencia del resto de la vegetación que conservaba sus hojas verdes. La foto fue tomada en otoño.
Otra morera en medio del verdor de la selva.
Hace muchos años, cuando la reserva recién se había creado, en la cima de la loma existían grandes jaulas con animales nativos como pumas, corzuelas y chanchos del monte debido que ella fue establecida
"Zona
destinada a estación biológica para estudios etológicos y cría de especies de
la fauna silvestre autóctona para su repoblación y recuperación", con el objetivo específico de
"Investigación científica. Preservación de especies y diversidad genética". Es una "reserva estricta" lo que significa que nadie puede ingresar a ella, aspectos de los que me he enterado al investigar sobre los orígenes de la misma para este blog. (Fuente: SIFAP, Sistema Federal de Áreas Protegidas). Actualmente esas jaulas están vacías y no se respetan en lo más mínimo aquellos objetivos. En el cartel de entrada a la reserva (arriba), aparece involucrado, además, el "Ministerio de desarrollo productivo" de la provincia. Desconozco si los objetivos para los cuales ella ha sido creada han sido modificados legislativamente.
Aparte de estas irregularidades que, a mi modo de ver, podrían ser gravísimas, quería mostrar con este relato la belleza del lugar, apto para una tranquila caminata de una hora y media o dos, escuchando y observando a numerosas aves y tener el encuentro, tal vez, con animales salvajes como me ocurrió en dos oportunidades: una culebra y una corzuela que se escondió rápidamente en la espesa vegetación, como así también reptiles, arácnidos y muchos insectos, lo que me obliga a recomendar precaución en el momento de transitarla. Es importante, además, no recorrer el camino en épocas de lluvias puesto que las laderas son muy empinadas y arcillosas y suelen derrumbarse.
Unos quince minutos después de iniciar la caminata, se llega al río Aguas chiquitas que, por lo general, trae poca agua en su cauce y se cruza con facilidad (por medio de piedras ya que le camino se destruyó hace años), aunque hay que tener mucho cuidado en el verano pues crece con las abundantes lluvias.
"Investigación científica. Preservación de especies y diversidad genética". Es una "reserva estricta" lo que significa que nadie puede ingresar a ella, aspectos de los que me he enterado al investigar sobre los orígenes de la misma para este blog. (Fuente: SIFAP, Sistema Federal de Áreas Protegidas). Actualmente esas jaulas están vacías y no se respetan en lo más mínimo aquellos objetivos. En el cartel de entrada a la reserva (arriba), aparece involucrado, además, el "Ministerio de desarrollo productivo" de la provincia. Desconozco si los objetivos para los cuales ella ha sido creada han sido modificados legislativamente.
Aparte de estas irregularidades que, a mi modo de ver, podrían ser gravísimas, quería mostrar con este relato la belleza del lugar, apto para una tranquila caminata de una hora y media o dos, escuchando y observando a numerosas aves y tener el encuentro, tal vez, con animales salvajes como me ocurrió en dos oportunidades: una culebra y una corzuela que se escondió rápidamente en la espesa vegetación, como así también reptiles, arácnidos y muchos insectos, lo que me obliga a recomendar precaución en el momento de transitarla. Es importante, además, no recorrer el camino en épocas de lluvias puesto que las laderas son muy empinadas y arcillosas y suelen derrumbarse.
Otro cartel indicativo (nótese que no se prohíbe la entrada)
Abajo: seis fotos del río, tomadas en otoño e invierno. Aún así, la vegetación se muestra viva y abundante.
Las orillas del río están repletas de piedras de distintos tamaños, muchas de ellas ciclópeas, como la de la foto.
En una oportunidad, nos aventuramos a explorarlo unos cientos de metros, atraídos por la hermosura del follaje y el misterio que la quebrada nos inspiraba. En el trayecto nos topamos con algunas dificultades, hasta que la altura de una enorme piedra nos impidió continuar por el cauce ya que no contábamos con las herramientas necesarias para sortearla.
Pequeño salto en el cauce
Este salto tiene aproximadamente, dos metros
Vista desde el río
Sitio a partir del cual nos fue imposible continuar.
El río posee un yacimiento paleontológico del que
se extrajeron fósiles de mamíferos y cocodrilos (www.tucumanturismo.gov.ar/dondeir.php), por lo que es aún más incomprensible que la reserva pueda ser visitada y explorada por público en general.
Desde hace algunos meses de este año (2016), el gobierno de la provincia decidió construir una serie de accesos (escaleras y pasamanos) en los tramos más pronunciados y difíciles de la senda a fin de que las cascadas puedan ser visitadas por una mayor cantidad de personas.
Entre los vegetales observados, pude fotografiar los siguientes, de los cuales sólo conseguí averiguar algunos nombres vulgares y científicos:
Esta planta tiene unos pocos cms. de altura y se destaca por el vivo color de sus flores.
Culantrillo o cabellera de Venus (género Pteridaceae). No pude identificar la especie.
Lágrima de la virgen, cebolla del diablo o cebolla silvestre (Nothoscordum Gracile)
Bosque de culantrillos
Helechos Pteridium caudatum (Dennstaedtiaceae)
La misma Bromelia fotografiada de frente
También se hallan hongos xilófagos, como el que se observa en la foto y cuyo nombre no he podido establecer, pero es muy común hallarlo.
Los dejo con esta melancólica imagen del camino recorrido. Será hasta un próximo encuentro en "noroestelindo".
Marcela Neme, Setiembre 2014